El Atlanta Allure

 Estamos llegando a la siguiente etapa en los casos legítimos para elegir si Obamacare es sagrado. Para aquellos de ustedes que han estado dormitando durante la discusión, aquí hay una breve sinopsis. Los izquierdistas aprobaron una ley que construía un orden. Las personas con la forma de comprar protección para pagar sus costos clínicos deben comprar. Se evita a numerosos jóvenes, jubilados y pobres con el argumento de que están calificados para recibir atención financiada. Para permitir que las personas adquieran protección, se han corregido numerosos principios, por ejemplo, los proveedores de redes de seguridad actualmente no pueden rechazar la propagación a la luz de una condición previa. La expectativa es la combinación de la ley y las nuevas pautas llevarán a millones de personas más a los puestos de protegidos.

Uno de los casos "enormes" fue escuchado por el juez Roger Vinson en Florida. Creó lo que debe describirse como una elección sensacional, tachando a todo Obamacare de ilegal. Desde numerosos puntos de vista, la autoridad designada dio una opción política en contraposición a una legítima, describiendo la circunstancia actual como correspondiente a la reunión informal de Boston rebelde contra el deber del té impuesto por los ingleses. Es una invitación a la batalla y, para garantizar el efecto más extremo para su juicio, puso el encanto en el camino rápido. El Partido Republicano necesita que el caso llegue al Tribunal Superior tan pronto como sea posible, confiando en que los diputados conservadores estarán de acuerdo con el juez Vinson. Sosteniéndolos está el Tribunal de los Seductores del undécimo Circuito. Se espera que tres adjudicadores, seleccionados por parcela, escuchen el caso en junio. Dos de los tres fueron designados por el presidente Clinton.

Las personas normalmente destacan las órdenes de protección contra colisiones, sin embargo, esto es extraordinario. Tienes la decisión de conducir. No tiene una decisión sobre si se enferma. La verdadera contención se reduce a esto. En el momento en que las personas no tienen protección y no pueden hacerse cargo de las pestañas de sus clínicas, las clínicas médicas agregan las obligaciones a sus gastos generales y dan los gastos a las agencias de seguros como facturas ampliadas. En caso de que aún haya un contratiempo, consiguen que el ciudadano contribuya. Por lo tanto, obligar a las personas a comprar protección implica tarifas más bajas para los protegidos y menos interés para los ciudadanos en contribuir. Las personas que no acepten protección deberían cubrir más gastos. En cualquier caso, debe haber más efectivo disponible para pagar los servicios médicos, ya que la nueva ley excluyó el arreglo para reforzar el creciente gasto de los medicamentos.

Este encanto está sacando las armas serias. Paul Lenient se dirige a los 26 estados que desafían la ley. Michael Carvin, igualmente prominente, está hablando con la Public League of Autonomous Business, mientras que Neal Katyal, el especialista general interino de Estados Unidos, sostiene el caso de la administración. Sin embargo, para esta legítima lucha interna, con frecuencia se descuida una certeza. La ley y las pautas están en el poder. Ahora están cambiando la verdad de la cobertura médica en el terreno a medida que los estados se mueven para hacer negocios de protección que brindan a más personas la admisión a una cobertura de atención médica modesta. Los estados a partir de ahora que se niegan a diseñar las operaciones corren el riesgo de que el gobierno fuerce una respuesta, esperando que gane los casos, obviamente. Independientemente de quién gane en Atlanta, acercará los cuerpos de prueba contra el comando al Tribunal Superior. Vivimos en ocasiones fascinantes.